Seguimos con la serie de posts para descubrirte las 10 mejores formas de visitar los Templos de Angkor. Si primero le tocó el turno a la visita en vehículo privado con aire acondicionado, y luego a recorrer Angkor sobre el archiconocido tuc tuc, ahora ha llegado la hora de los deportistas.
3. Los Templos de Angkor en bicicleta
No hace falta ser un ciclista profesional para aventurarse a visitar los Templos de Angkor en bici, pero si tener algo de pericia «al manillar».
Ventajas:
- Nos permite disfrutar del entorno de forma silenciosa y pausada.
- Su versatilidad nos da la posibilidad de acceder y recorrer senderos y zonas fuera de las zonas turísticas.
- No contamina y de paso nos permite hacer algo de ejercicio en un entorno único.
- Podemos parar cuando nos plazca a disfrutar a cada paso del camino.
- Podemos contratar a un guía especializado que nos acompañe.
Desventajas:
- Dadas las dimensiones del Parque de los Templos de Angkor, no es adecuada para todas las condiciones físicas y/o edad.
- El calor y la lluvia suelen obligarnos a detener nuestra visita y buscar un lugar donde resguardarnos, a veces durante varias horas.
- Muchos proveedores no se preocupan demasiado por el mantenimiento de las bicicletas, con lo que los pinchazos y las averías suelen ser frecuentes.
- Hay pocos guías en español que estén dispuestos a subirse a una bicicleta, y éstos están sujetos a un suplemento que encarece el servicio.
Si se trata de un grupo heterogéneo de viajeros, con diferente condición física y/o edad, recomendamos contratar un guía y un vehículo escoba que les acompañe (de forma discreta) a fin de recoger a aquellos que necesiten un descanso o que hayan sufrido algún contratiempo. En todos los casos aconsejamos contratar el servicio de traslado de las bicicletas a fin de comenzar el recorrido en una zona libre de tráfico. Eso nos permite comenzar a disfrutar de la experiencia desde el minuto 1 y de paso darnos tiempo para familiarizarnos con la montura en un entorno seguro.